Juan J. Molina
viernes, 11 de diciembre de 2020
viernes, 9 de octubre de 2020
sábado, 19 de septiembre de 2020
Inmigración, pandemia y despropósitos
MURCIA. Hay quien dice que la valía de un hombre se mide en la talla de sus enemigos. De la misma forma, la valía de unos gobernantes se puede medir en la dureza de los retos a los que se enfrenten. No cabe duda de que los actuales gobiernos se enfrentan a un desafío enorme con la pandemia mundial que estamos sufriendo, y de cómo la gestionen va a depender el éxito o el fracaso de su periplo político.
ES UN DESPROPÓSITO EL ENFRENTAMIENTO Y LA FALTA DE ENTENDIMIENTO ENTRE EL DELEGADO DEL GOBIERNO Y LAS AUTORIDADES LOCALES Y REGIONALES
Solo aquellos que estén al nivel de capacidad necesario para enfrentarse a este colosal reto que les ha tocado lidiar, saldrán victoriosos. Y con ellos, también podremos cantar victoria los demás. Por el contrario, los que no estén a la altura, anteponiendo sus conveniencias a las decisiones correctas exhibirán sus debilidades y nos conducirán a un fracaso tras otro.
El enfrentamiento y la falta de entendimiento entre el delegado del Gobierno central en nuestra región y las autoridades locales y regionales en el tema de la inmigración ilegal es un despropósito que pone de manifiesto la falta de rigor a la hora de nombrar personas para determinados cargos. Cualquiera puede elegir a alguien y los resultados de su trabajo demostrar que la elección fue un error, pero lo que no tiene sentido es persistir en el error. Hasta un sabio puede sentarse en un hormiguero, pero sólo un necio permanece sentado en él.
La inmigración ilegal es un drama humano que en tiempos de pandemia alcanza el calificativo de tragedia. Tragedia para los que huyen del hambre, la miseria o la guerra y además con la espada de Damocles sobre sus cabezas de poder ser portadores de un virus letal en ocasiones. Y tragedia también para los ciudadanos de los países que los reciben, que deben atenderles de manera adecuada, proporcionándoles medios de subsistencia y atención sanitaria. Lo último que necesitamos en un momento así es la ineficacia y la descoordinación entre nuestras autoridades. Es necesario atajar este problema de raíz, las autoridades están para solucionar problemas y no para crearlos. El que no esté preparado, a su casa y que venga otro más preparado. Ni un minuto más de descoordinación, ni un minuto más de dejadez en la custodia de esos inmigrantes que en su mayoría deben guardar cuarentena, ni una fuga más de personas infectadas o que han estado en contacto con infectados, ni una discusión más sobre quién tiene o no tiene competencias, porque si a estas alturas hay alguien que desconoce sus competencias, no sé a qué está esperando para coger su petate y las de Villa Diego. A alguno ha tenido que venir un juez a explicarle sus obligaciones. Como dijo aquel, ‘manda huevos’.
Nos estamos jugando la vida de todos, en nuestra región ya la han perdido 189 paisanos, casi 16.000 ya se han contagiado y 59 se debaten mientras escribo esto entre la vida y la muerte en una UCI ¿De verdad creen que con este panorama necesitamos a alguien que se supone que cobra un sueldo para tomar decisiones creándonos más problemas? Con las cosas de comer no se juega y con las de vivir, con esas, ya ni les cuento.
Juan José Molina.
Portavoz del Grupo Parlamentario de Ciudadanos.
https://murciaplaza.com/Deaqualaeternidad1
jueves, 6 de agosto de 2020
martes, 4 de agosto de 2020
Territorios de calma
Territorios de calma
Juan José Molina 03.08.2020Cuando Diez Osos no encontraba una respuesta satisfactoria a aquello de lo que se trataba siempre terminaba las reuniones con la misma frase: seguiremos hablando otro día. Nunca tenía prisa por alcanzar una respuesta inmediata, ésta, como una fruta madura tenía que llegar en su justo momento y solo entonces la cuestión se daba por zanjada. Admiro ese saber esperar, la paciencia y el placer de aquellas reuniones en su tienda fumando una pipa hecha con sus propias manos en la que mezclaba a partes iguales tabaco, amistad, experiencia y la sabiduría que nace de ese saber entender la vida con una cadencia suave y lenta» (Bailando con lobos).
En las tribus africanas la imagen de los viejos sentados bajo un árbol ancestral usado para lo mismo desde generaciones, formaba parte del paisaje social, los ancianos hablaban y hablaban sin prisa, buscando en la experiencia y los conocimientos transmitidos por sus antepasados las respuestas a los problemas diarios, el solo hecho de aquella visión cotidiana tranquilizaba a la gente que se sentía segura y confiada en las decisiones de sus mayores.
La vieja tradición japonesa nos relata los 'Encuentros' o 'Zatsudan', de las gentes de la aldea para tratar temas que concernían a todos y donde el fin principal no era llegar a una conclusión, ni siquiera decidir qué propuesta u opinión era la mejor, lo realmente importante era el hecho de reunirse, de hablar, de escuchar a todos y respetar todas las opiniones como la verdad indiscutible proveniente de la vivencia individual, una cultura que interpretaba hasta los silencios de aquellos que no intervenían como una forma de hablar, porque el silencio también es una forma de hablar.
La política en nuestros días es una batalla diaria dentro de una guerra en la que, como ocurre en todas las guerras, solo hay perdedores aunque algunos crean haber ganado.
¿En qué momento perdimos esa capacidad de escucharnos, perdimos la paciencia para esperar la respuesta adecuada, la sensibilidad para oír la palabra de los que callan? Hemos avanzado mucho y para mejor, pero en el camino hemos ido dejando tesoros que nos legaron nuestros antepasados, cosas que solo podremos recuperar echando la vista a atrás, volviendo hacia territorios de calma y sosiego donde conversar, escuchar y reunirse vuelvan a ser lo normal y una forma más sana de gobernar nuestras cosas.
Desde Ciudadanos queremos recuperar esa calma, el trabajo conjunto, el diálogo y la búsqueda de acuerdos en todos los temas. Solo desde la unidad se consigue la fuerza y esa unidad, en estos tiempos, es oro molido. La Ley del Mar Menor es un ejemplo del camino a seguir, un camino que se anda desde el equilibrio y la moderación y que, no lo duden, será el que mi partido va a señalar como destino.
En ese viaje invitamos al resto de fuerzas políticas a acompañarnos sin miedo y sin egoísmos cortoplacistas, con ánimo constructivo.
Por el bien de todos, recuperemos los territorios de calma.
https://www.laopiniondemurcia.es/opinion/2020/08/03/territorios-calma/1134179.html
viernes, 22 de mayo de 2020
Amadeo
Los políticos españoles llevamos siglos centrándonos en los efectos colaterales que producen en nosotros los problemas, en lugar de centrarnos en los problemas en sí
Juan José Molinajueves, 23 de abril de 2020
Sin test masivos a la población sobre el coronavirus no habrá una salida segura del confinamiento, sólo si somos capaces de identificar al enemigo podremos combatirlo. Así se lo hice saber al Presidente y al Consejero de Salud de la Comunidad Autónoma de Murcia.